domingo, 17 de noviembre de 2024

Calzone de espinacas, jamón y queso

 Calzone de espinacas, jamón y queso



Hola, en esta entrada al blog os voy a enseñar a hacer una receta sabrosa y saludable. 

INGREDIENTES

  • 2 masas de pizza fresca
  • 300 gramos de espinacas ya limpias
  • 150 gramos de jamón york en taquitos
  • 150 gramos de queso Gorgonzola
  • 1 cucharada de harina
  • 1 taza de leche
  • 1 pizca de sal
  • Pimienta negra
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Queso parmesano rallado

PASOS A SEGUIR:

Preparamos el relleno de espinacas:

  • Para preparar este calzone de espinacas, jamón y queso vamos a comenzar cociendo las espinacas. Para ello ponemos en una olla agua a hervir con una pizca de sal, cuando comience a hervir incorporamos las espinacas y dejamos cocer unos 8 o 10 minutos.
  • Sacamos y escurrimos muy bien.
  • En una sartén con un poco de aceite de oliva virgen extra salteamos las espinacas, incorporamos la harina, mezclamos y dejamos que se cocine un par de minutos, añadimos la leche y el queso.
  • Continuamos mezclando mientras se cocina y se elabora la crema, por último añadimos los taquitos de jamón y salpimentamos. Ya tenemos listo nuestro delicioso relleno.


Rellenamos el calzone:

  • Ponemos la mitad del relleno sobre la mitad de una de las bases de pizza, cubrimos con la otra mitad y mojándonos las manos con agua cerramos los bordes uniéndolas como un cordón.
  • Pincelamos la superficie con un poco de aceite de oliva virgen extra y espolvoreamos con queso parmesano rallado.

Horneamos:

  • Horneamos en horno precalentado a 180º C, con calor circular unos 20 minutos. Si cocináis con temperatura arriba y abajo podéis subir la temperatura del horno a 200ºC.

¡Espero que os guste la receta!




Los ultraprocesados: ¿Cómo afectan nuestra salud y qué podemos hacer para evitarlos?

Voy a hablar sobre como están normalizados dentro de lo que comemos habitualmente los alimentos ultraprocesados.

¿Qué son los alimentos ultraprocesados?

De acuerdo con la OMS, los productos ultraprocesados contienen una cuidadosa combinación de azúcar, sal, grasa y aditivos concluyendo que son causantes de obesidad, diabetes, enfermedades cardiovasculares y algunos tipos de cáncer.
Algunos ejemplos serían: 
  • Bebidas azucaradas como refrescos y jugos industrializados.
  • Snacks empaquetados: papas fritas, galletas, barras de cereal.
  • Comidas congeladas o listas para calentar: pizzas, nuggets, lasañas.
  • Embutidos como salchichas, mortadela y jamón de baja calidad.
  • Postres empaquetados: pasteles, donas, flanes.
  • Cereales de desayuno con alto contenido de azúcar.
  • Salsas y aderezos industrializados como mayonesa, kétchup y salsas para pasta.

Diferencias entre alimentos frescos, procesados y ultraprocesados
  • Alimentos sin procesar o mínimamente procesados: son aquellos que no han sido sometidos a ningún proceso industrial, es decir, que no se les ha agregado sustancias en su procesamiento, como pueden ser las frutas, verduras, frutos secos crudos, semillas, carnes, pescados y huevos frescos. Tienen que ser la base de nuestra alimentación.
  • Alimentos procesados: son aquellos alimentos o productos alimenticios que han sufrido algún proceso industrial, o bien porque se les haya añadido algún aditivo (conservantes, grasas u otro tipo de ingredientes), o porque se les haya sometido algún tratamiento térmico o método de conservación como el salado, fermentación… Son productos de calidad que pueden estar presentes en nuestra alimentación de forma habitual. Verduras enlatadas, verduras congeladas, legumbres cocidas, conservas de pescado, gazpacho envasado, yogur natural (sin azúcar añadido, ni edulcorantes).
  • Alimentos ultraprocesados: son productos que no llevan ningún alimento entero, completo o en su estado natural. Son formulaciones industriales elaboradas a partir de sustancias derivadas de los alimentos o sintetizadas de otras fuentes orgánicas. Vienen listos para consumirse y requieren de poca o ninguna preparación culinaria. Bollería industrial, refrescos, pizzas preparadas, postres lácteos azucarados (natillas, flanes, helados…), carnes procesadas (salchichas…). Aportan una densidad energética alta y un escaso valor nutricional. No es recomendable su consumo ya que está asociado a sobrepeso / obesidad, y comorbilidades asociadas (hipertensión, diabetes, hipercolesterolemia…).


ENFERMEDADES POR CULPA DE LOS ULTRAPROCESADOS

En España, el 20,3% de los alimentos que se consumen son ultraprocesados, según un estudio de la Universidad de Sao Paulo que nos sitúa como segundo país mediterráneo con mayor consumo después de Malta.

Nuevas investigaciones sugieren que estos alimentos son especialmente perjudiciales para el cerebro, ya que afectan al estado de ánimo y a la cognición. Los investigadores identificaron vínculos directos entre un mayor consumo de alimentos ultraprocesados y una mayor de riesgo de muertes por enfermedades cardiacas, diabetes de tipo 2, obesidad, ansiedad, depresión, problemas para dormir y muertes con todo tipo de causas. 

Las dietas ricas en estos alimentos están relacionadas con un 44% más de riesgo de depresión y un 48% más de riesgo de ansiedad.

LOS ULTRAPROCESADOS PUEDEN CAUSAR ADICCIÓN

Las pruebas observacionales más sólidas procedentes de estudios prospectivos se inclinan hacia la idea de que consumir grandes cantidades de alimentos ultraprocesados aumenta el riesgo de aparición de depresión.

Otro problema de los alimentos ultraprocesados es que pueden crear adicción. "Los alimentos ultraprocesados tienen más en común con un cigarrillo que con los alimentos de la madre naturaleza", afirma Ashley Gearhardt, profesora de psicología de la Universidad de Michigan.

"No se encuentran alimentos ricos en azúcar y grasa a la vez", dice Gearhardt. "Ese es el sello distintivo de los alimentos ultraprocesados. Si añadimos sal, saborizantes artificiales y colores brillantes, nuestro cerebro simplemente pierde el control sobre estos alimentos".


BIBLIOGRAFÍA:








Importancia de la hidratación en adolescentes

 

La hidratación en adolescentes es fundamental y altamente recomendable debido a los beneficios que ofrece para el correcto funcionamiento del organismo. Durante esta etapa de crecimiento, el cuerpo de los adolescentes experimenta cambios metabólicos y físicos que incrementan la importancia de una ingesta adecuada de agua para mantener las funciones vitales y un equilibrio hídrico saludable.
BENEFICIOS DE LA HIDRATACIÓN EN ADOLESCENTES
- Regulación de funciones corporales: El agua es esencial para procesos como la digestión, el transporte de nutrientes y la eliminación de desechos; además juega un papel crucial en la regulación de la temperatura corporal, especialmente durante la actividad física.


- Apoyo al rendimiento cognitivo y físico: Una hidratación adecuada puede mejorar la concentración, la memoria y el rendimiento académico. Además, es esencial para mantener la resistencia física y evitar la fatiga, especialmente en adolescentes activos.


- Mineralización ósea y desarrollo muscular: Las bebidas con minerales, como el agua mineral natural, pueden contribuir al fortalecimiento de huesos y dientes, ayudando a prevenir enfermedades futuras como la osteoporosis.

RECOMENDACIONES

- Consumo diario de agua: Se sugiere que los adolescentes consuman entre 1.5 y 2 litros de agua al día, ajustando esta cantidad según factores como la actividad física, la dieta y el clima.

- Variedad en las fuentes de hidratación: Aunque el agua es la mejor opción, se pueden incluir otras fuentes como frutas ricas en agua y bebidas sin azúcares añadidos. Sin embargo, se deben limitar las bebidas con cafeína y azúcares debido a sus efectos secundarios, como el riesgo de deshidratación y el impacto en la glucosa.

- Optimización del metabolismo energético: Una hidratación adecuada es clave para mantener el metabolismo energético eficiente. El agua es necesaria para reacciones bioquímicas como la glucólisis y la lipólisis, que proveen energía esencial para las actividades diarias y el desarrollo corporal en la adolescencia.

- Prevención de problemas renales: El consumo adecuado de agua contribuye a prevenir cálculos renales y otras disfunciones en el sistema urinario. Los adolescentes que mantienen una ingesta óptima de líquidos ayudan a diluir la orina, reduciendo el riesgo de acumulación de sales y minerales.

- Mejora de la salud cutánea: La hidratación también está asociada con una mejor salud de la piel, un tema relevante para los adolescentes, especialmente en la prevención de problemas como el acné y la piel seca. El agua promueve la elasticidad cutánea y elimina toxinas a través de la transpiración.


RIESGOS DE UNA HIDRATACIÓN INADECUADA



- Deshidratación y fatiga: La deshidratación puede causar una disminución significativa en los niveles de energía y provocar fatiga, afectando el rendimiento físico y mental. Incluso una pérdida leve de agua corporal puede reducir la concentración y el tiempo de reacción.

- Alteraciones en la función cardiovascular: La falta de líquidos en el organismo puede incrementar el esfuerzo del corazón para bombear sangre, llevando a una mayor frecuencia cardíaca y menor rendimiento durante actividades físicas intensas. Esto es especialmente preocupante en adolescentes que practican deportes.

- Trastornos de termorregulación: Una hidratación insuficiente afecta la capacidad del cuerpo para regular su temperatura, lo que incrementa el riesgo de golpes de calor en condiciones de altas temperaturas o durante ejercicios intensos.

Una hidratación deficiente puede llevar a problemas como:

Fatiga

Dificultad para concentrarse

Dolores de cabeza

Incluso afecciones más graves como el golpe de calor durante actividades físicas intensas.

Por ello, es crucial inculcar hábitos de hidratación adecuados en esta etapa.

En conclusión, la hidratación es no solo beneficiosa sino esencial en los adolescentes, dado su impacto en la salud física, cognitiva y emocional. Promover el consumo regular de agua y educar sobre los riesgos de una hidratación insuficiente debería ser una prioridad en su cuidado.

REFERENCIAS:

La nutrición en personas mayores: Un camino hacia una vida Plena y Saludable

La nutrición en personas mayores: Un camino hacia una vida Plena y Saludable

A medida que avanzamos en la vida, el cuerpo cambia y, con él, las necesidades nutricionales. La nutrición no solo es importante para mantenernos en forma cuando somos jóvenes, sino que se vuelve aún más crucial en la tercera edad, cuando el cuerpo sufre cambios que afectan a la salud, energía y bienestar.

Para muchas personas mayores, la alimentación adecuada puede marcar la diferencia entre una vida independiente y saludable o una llena de complicaciones físicas y emocionales. En este blog, exploramos cómo una nutrición balanceada puede ayudar a las personas mayores a mantenerse saludables, activas y con la mejor calidad de vida posible.


1. ¿Por qué la nutrición es tan importante en la tercera edad?

A medida que envejecemos, nuestro cuerpo sufre una serie de cambios. La piel se vuelve más delgada, los huesos pierden densidad, y el metabolismo tiende a disminuir. Estos cambios pueden hacer que el cuerpo tenga más dificultades para absorber nutrientes y mantenerse fuerte. A su vez, las personas mayores son más propensas a desarrollar enfermedades crónicas como la hipertensión, diabetes, artritis o problemas cardiovasculares.

Una dieta adecuada no solo puede ayudar a prevenir enfermedades, sino que también para mejorar la salud mental y emocional. Comer bien contribuye a mantener una mente alerta, un corazón sano y, sobre todo, una vida activa y llena de energía.

2. Los nutrientes para las personas mayores

  • Proteínas: 

La pérdida de masa muscular es algo común con la edad, lo que puede afectar la movilidad y aumentar el riesgo de caídas. Incluir suficientes proteínas en la dieta es vital para mantener los músculos fuertes y funcionales.

Alimentos que contengan proteínas: Carnes magras (pollo, pavo), pescado, huevos, legumbres, tofu, lácteos y frutos secos son excelentes fuentes de proteínas.

  • Calcio y vitamina D:

La osteoporosis, o fragilidad ósea, es más común a medida que envejecemos. El calcio y la vitamina D son esenciales para mantener los huesos fuertes y prevenir fracturas.

Alimentos que contengan calcio y vit D: Productos lácteos como leche, queso y yogur, verduras de hojas verdes como espinacas, y alimentos enriquecidos con vitamina D como el pescado graso o los cereales fortificados.

  • Ácidos grasos Omega-3:

Los ácidos grasos omega-3 no solo son buenos para el corazón, sino que también pueden proteger contra problemas cognitivos, como el deterioro de la memoria y la concentración.

Alimentos que contengan: pescados como el salmón, las sardinas y el atún, nueces, semillas de chía y aceites vegetales son fuentes ricas en omega-3.

  • Fibra:

El estreñimiento es un problema común entre las personas mayores, y la fibra puede ayudar a mantener el sistema digestivo funcionando correctamente. Además, la fibra ayuda a controlar el colesterol y puede reducir el riesgo de enfermedades del corazón.

Alimentos que contengan fibra: Frutas, verduras, granos enteros, legumbres y frutos secos.

  • Vitamina B12:

A medida que envejecemos, la absorción de vitamina B12 puede volverse menos eficiente, lo que podría afectar la energía y el funcionamiento del sistema nervioso.

Alimentos que contengan Vit B12: Carnes, pescados, lácteos y alimentos enriquecidos son buenas fuentes de estas vitaminas.

  • Agua:

La sed tiende a disminuir con la edad, lo que puede llevar a una deshidratación, a veces sin darnos cuenta. Esto puede afectar nuestra energía, el funcionamiento mental y la digestión.


3. Los Desafíos Nutricionales en la Tercera Edad

Aunque sabemos que comer bien es importante, en la vida real, las personas mayores pueden enfrentar varios obstáculos que dificultan seguir una dieta saludable:

  • Pérdida de apetito: A veces, el gusto o el olfato cambian con la edad, lo que puede hacer que la comida no sea tan atractiva. Además, ciertos medicamentos pueden reducir el apetito.

  • Problemas dentales: Las dificultades para masticar alimentos pueden hacer que algunas personas eviten ciertos grupos de alimentos. Es importante ofrecer alternativas fáciles de masticar, como sopas, purés o batidos.

  • Limitaciones económicas: Las personas mayores que viven con una pensión o tienen ingresos limitados pueden tener dificultades para acceder a alimentos frescos y nutritivos.

  • Soledad: La soledad puede afectar el apetito y la motivación para cocinar. Comer solo puede hacer que las comidas sean menos atractivas, lo que lleva a una menor ingesta de nutrientes.


4. Consejos para Mejorar la Nutrición en Personas Mayores

  • Comidas pequeñas y frecuentes: En lugar de forzar tres comidas grandes al día, intenta hacer cinco o seis comidas más pequeñas. Esto puede ser más fácil de digerir y puede mantener el apetito en niveles constantes.

  • Comer en compañía: Comer con otras personas no solo es más placentero, sino que también puede incentivar el apetito. Si es posible, trata de compartir las comidas con amigos o familiares.

  • Variedad: Incluir una variedad de alimentos ricos en nutrientes asegura que el cuerpo reciba todo lo que necesita. No te quedes con lo mismo todos los días; experimenta con nuevos alimentos que sean fáciles de preparar.

  • Suplementos nutricionales: Si es difícil alcanzar las necesidades diarias solo con la comida, los suplementos pueden ser una ayuda, pero siempre bajo la recomendación de un médico.

  • Hacer la comida más sabrosa: Si los cambios en el gusto han reducido el disfrute de la comida, prueba con hierbas y especias frescas, que pueden hacer que los platos sean más sabrosos y atractivos sin añadir calorías vacías.


5. Conclusión

Una alimentación adecuada es clave para asegurar una vida plena y saludable en la tercera edad. No solo contribuye a prevenir y controlar enfermedades, sino que también mejora la calidad de vida, aumenta la energía y revitaliza el bienestar general. Aunque es cierto que existen desafíos relacionados con la nutrición en esta etapa, con una planificación adecuada, el apoyo de familiares y algunos ajustes en los hábitos alimenticios, los adultos mayores pueden llevar una vida activa, independiente y satisfactoria.

Bibliografía

  • Organización Mundial de la Salud (OMS).
    "Nutrición en el envejecimiento: Estrategias para una vida saludable."
    World Health Organization (WHO).
  • OMS.
    Informe sobre la salud mundial 2020: La salud en la tercera edad.
    Organización Mundial de la Salud (OMS), 2020.
  • Academia de Nutrición y Dietética (AND).
  • FAO.
    Nutritional Care and Support for Older People.
    Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), 2017.
  • FAO.
    The State of Food Security and Nutrition in the World 2021: Transforming food systems for food security, improved nutrition, and affordable healthy diets for all.
    FAO, 2021.



Nutrición y huella de carbono: cómo elegir alimentos que beneficien el medio ambiente.

 El tema de "Nutrición y huella de carbono" aborda la intersección entre nuestras elecciones alimentarias y su impacto en el medio ambiente, con el objetivo de promover dietas sostenibles que beneficien tanto la salud personal como la del planeta.

¿Qué es la huella de carbono de los alimentos?

La huella de carbono de un alimento mide la cantidad total de gases de efecto invernadero (GEI) emitidos durante su ciclo de vida, desde la producción hasta el consumo. Esto incluye:

  • Producción agrícola: Cultivo, cría de animales, uso de fertilizantes y pesticidas.
  • Procesamiento y transporte: Energía utilizada para procesar, empacar y transportar los alimentos.
  • Almacenamiento y preparación: Refrigeración y cocción.                                                                

Principales alimentos y su huella de carbono

  1. Alimentos con alta huella de carbono:

    • Carne roja: Es uno de los mayores contribuyentes debido a la emisión de metano por los rumiantes (vacas, ovejas).
    • Productos lácteos: Producen emisiones significativas debido al uso de recursos y la generación de metano.
    • Alimentos procesados: Su producción intensiva requiere energía adicional.
  2. Alimentos con baja huella de carbono:

    • Legumbres y granos: Lentejas, garbanzos, y quinoa son sostenibles y ricas en nutrientes.
    • Frutas y verduras locales y de temporada: Reducen la necesidad de transporte y almacenamiento prolongado.
    • Alimentos basados en plantas: Tienen un impacto ambiental menor que los productos animales.


Cómo elegir alimentos que beneficien al medio ambiente

  1. Reducir el consumo de carne:

    • Incorporar más comidas basadas en plantas (dieta flexitariana, vegetariana o vegana).
    • Elegir proteínas alternativas como tofu, tempeh o legumbres.
  2. Optar por alimentos locales y de temporada:

    • Los productos locales minimizan las emisiones por transporte.
    • Comer de temporada reduce el uso de energía para producir en condiciones artificiales.
  3. Reducir desperdicios:

    • Planificar las comidas para evitar el exceso de compras.
    • Aprovechar los sobrantes y compostar residuos orgánicos.
  4. Elegir alimentos con menor procesamiento:

    • Priorizar productos frescos o mínimamente procesados.
    • Evitar envases plásticos siempre que sea posible.
  5. Optar por certificaciones sostenibles:

    • Buscar etiquetas como "orgánico", "de comercio justo" o "certificación sostenible".

Beneficios de elegir alimentos con baja huella de carbono

  • Reducción del cambio climático: Menos emisiones de GEI ayudan a mitigar el calentamiento global.
  • Conservación de recursos: Menor uso de agua, energía y tierra.
  • Mejora de la salud: Dietas más ricas en vegetales están asociadas con un menor riesgo de enfermedades crónicas.

Retos y oportunidades

  • Retos:
    • Falta de conciencia sobre el impacto ambiental de las elecciones alimenticias.
    • Barreras económicas y de acceso a alimentos sostenibles en algunas regiones.
  • Oportunidades:
    • Innovaciones como carne cultivada en laboratorio o alternativas basadas en plantas.
    • Mayor disponibilidad de información y etiquetas para alimentos sostenibles.
  

Links utilizados:

La nutrición infantil: La Clave para un Crecimiento Saludable

La nutrición Infantil: La Clave para un Crecimiento Saludable

La nutrición infantil es fundamental para el desarrollo físico y cognitivo de los niños. Desde el nacimiento hasta la adolescencia, una dieta balanceada y rica en nutrientes es esencial para que los pequeños crezcan fuertes, saludables y con el suficiente impulso energético para aprender y jugar. Sin embargo, en un mundo lleno de opciones alimenticias a menudo poco saludables, los padres enfrentan desafíos al tratar de ofrecer lo mejor a sus hijos.

En este artículo, exploraremos la importancia de una buena nutrición durante la infancia, los nutrientes clave que los niños necesitan y algunos consejos prácticos para fomentar hábitos alimenticios saludables desde temprana edad.



¿Por qué es tan importante la nutrición infantil?

La nutrición en los primeros años de vida tiene un impacto directo en el desarrollo físico, mental y emocional de un niño. Durante los primeros cinco años, el cerebro experimenta un crecimiento rápido, y una dieta adecuada es crucial para asegurar que los niños alcancen su máximo potencial de desarrollo. Además, una alimentación saludable fortalece el sistema inmunológico, reduce el riesgo de enfermedades crónicas y ayuda a establecer patrones de comportamiento alimentario saludables a lo largo de la vida.



Nutrientes esenciales para el crecimiento infantil

Los niños necesitan una variedad de nutrientes para mantener un desarrollo óptimo. 

1. Proteínas

Las proteínas son fundamentales para el crecimiento y reparación de los tejidos. Ayudan al desarrollo de músculos, piel, huesos y órganos. Fuentes de proteínas saludables incluyen carnes magras, pescado, huevos, lácteos, legumbres y frutos secos.

2. Carbohidratos complejos

Los carbohidratos proporcionan energía para las actividades diarias. Es importante ofrecerles fuentes de carbohidratos complejos, como granos enteros, verduras y frutas, que también contienen fibra y vitaminas.

3. Grasas saludables

Las grasas son esenciales para el desarrollo cerebral, la absorción de vitaminas liposolubles y la protección de órganos. Fuentes de grasas saludables incluyen aguacates, frutos secos, aceite de oliva y pescados grasos como el salmón.

4. Vitaminas y minerales

Vitaminas como la A, C, D y el grupo B, junto con minerales como el hierro, calcio y zinc, son cruciales para la función inmunológica, la salud ósea y el desarrollo cerebral. Estos nutrientes se encuentran en alimentos como frutas, verduras, lácteos y carnes magras.

5. Agua

La hidratación es tan importante como la alimentación. El agua es vital para todos los procesos del cuerpo y debe ser consumida a lo largo del día, especialmente en épocas de calor o cuando los niños están físicamente activos.




Cómo fomentar buenos hábitos alimenticios en los niños

Crear hábitos alimenticios saludables no solo depende de lo que se les ofrece en la mesa, sino también del ambiente en el que se les introduce a los alimentos. Aquí dejamos algunos consejos prácticos para inculcar una buena nutrición desde temprano:


  • Variedad y colores: Ofrecer una amplia variedad de alimentos frescos y coloridos atrae a los niños y les ayuda a aprender sobre la importancia de una dieta equilibrada.

  • Involucra a los niños en la cocina: Hacer que los niños participen en la preparación de las comidas puede generar interés por alimentos saludables y les enseña la importancia de una alimentación nutritiva.

  • Comidas regulares: Establecer horarios regulares para las comidas y los refrigerios ayuda a crear una rutina que favorece el metabolismo y previene los antojos poco saludables.

  • Sé un modelo a seguir: Los niños aprenden mucho observando a los adultos. Si ven que disfrutas de alimentos nutritivos, es más probable que ellos también lo hagan.

  • Evita la sobreexposición a alimentos procesados: Aunque no hay que eliminar por completo los alimentos procesados, es importante reducir su consumo y ofrecerlos solo de manera ocasional. Es mejor optar por opciones más saludables, como galletas caseras o batidos de frutas.



Conclusión

La nutrición infantil es una inversión en la salud futura de los hijos. Al proporcionarles una dieta balanceada y rica en nutrientes desde pequeños, les damos las herramientas necesarias para crecer sanos, fuertes y con energía para enfrentar el día a día. Recuerda que la clave está en la consistencia, el ejemplo y, sobre todo, la paciencia. 

BIBLIOGRAFÍA

  • Elena, B. (2019). Alimentación saludable en la infancia: Guía para padres y cuidadores. Ediciones Pirámide.

  • Academia Española de Nutrición y Dietética (AEND). (2020). Nutrición Infantil. Recuperado de AEND.

  • World Health Organization (WHO). (2021). Nutritional care for children and adolescents: A guide for health care providers. Ginebra: Organización Mundial de la Salud.

  • National Health Service (NHS). (2019). Childhood nutrition: Healthy eating for children


viernes, 15 de noviembre de 2024

Bowl de arroz integral con salmón y vegetales asados




Voy a mostrar una receta fácil, rápida y saludable

 Para hacer un bowl de arroz integral con salmón y vegetales asados se necesitan los siguientes ingredientes: 

Verduras, puedes utilizar las verduras que más te gusten, pero yo utilizo estas:
- Espárrago verde
- Un poco de cebolla
- Medio diente de ajo
- Zanahoria
- Champiñón

Salmón, un filete.
Arroz, media taza. 
Sal al gusto.

Pasos a seguir:

1. Echa una cucharada de aceite de oliva en una olla y, cuando esté caliente, agrega el ajo. Cuando empiece a coger color, agrega el arroz. Da unas vueltas un par de minutos y añade el agua y una cucharadita de sal. Cocina a fuego alto durante 7 minutos, después baja el fuego y cocina a fuego lento 8 minutos más. 

2. Pica en trozos pequeños media cebolla y una zanahoria que previamente debes lavar y pelar. Sofríe en una sartén amplia ambas verduras con aceite de oliva.

3. Lava los espárragos verdes, quítales la parte dura y córtalos en trozos de tamaño medio. También lava los champiñones y córtalos en láminas.

4. Añade los espárragos y los champiñones a la sartén cuando veas que la cebolla se ha puesto blandita. Saltea las verduras y añade un poco de sal a todo.

5. Cuando veas que las verduras están tiernas, en el punto que a ti te gustan, vierte el arroz. Revuelve el arroz con las verduras y saltéalo durante 3-4 minutos.

6. Mientras salteas el arroz, en otra sartén echa un chorrito de aceite de oliva y cocina el salmón con un poco de sal.

7. Coloca el salmón en tu plato y acompáñalo del arroz que has preparado.