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Seguro que últimamente has escuchado decir a algún conocido que se ha pasado a la leche vegetal, ¿verdad?
Cada vez más gente está tomando esta decisión, y es una realidad que las leches vegetales representan una gran alternativa a la leche tradicional; la de vaca.
En este artículo os traigo ventajas y desventajas de unas y de otras para que decidas por ti mismo cuál es la más conveniente para ti.
Si te interesa esta información, ¡sigue leyendo!
Un poco de historia...
El uso de la leche de vaca para nuestro consumo se remonta a la época del Antiguo Egipto, 5.000 o 6.000 años atrás. Por aquella época ya se hablaba de leche y derivados lácteos, como la mantequilla y el queso. También se hacía distinción del ganado según el tipo de leche y se recuperó la primera estampa que representaba un ordeño, en las ruinas de un templo en Ur, cerca de Babilonia, perteneciente a aquella época.
A día de hoy, la leche sigue representando un alimento fundamental en nuestras dietas, sobre todo en la de los más pequeños. Es una buena fuente de calcio, proteínas de alta calidad, fósforo, magnesio y vitaminas muy importantes como la A, D, E; y otras del grupo B, como la B2, B12, etc.
Sin embargo, en los últimos años están en pleno auge las bebidas o leches vegetales, que constituyen una buena alternativa a la leche tradicional.
Las más consumidas son la de soja, avena, almendras, arroz y coco, aunque también podemos encontrar de cosas tan curiosas como de quinoa, sésamo, trigo sarraceno, cáñamo y de otros frutos secos. Cada una de ellas cuenta con unas peculiaridades que las hacen más interesantes para unas personas y que detallaré más adelante.
Entonces... ¿son mejores o peores?
Por otro lado, no todo lo referido a las leches vegetales va a ser negativo. También cuentan con una serie de ventajas frente a leche de vaca.
En primer lugar, según el Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO), las bebidas vegetales "tienen un mejor perfil lipídico", porque presentan menor cantidad de ácidos grados saturados (esos que no son tan buenos), mientras que su contenido en ácidos grasos insaturados es mayor. (La cantidad de grasas saturadas en la leche de vaca que consumimos puede reducirse eligiendo leche semidesnatada, o completamente desnatada).
Otra ventaja y todavía más importante es que constituyen la única alternativa a personas con alergia a la proteína de la leche. No confundamos alergia con lo que comúnmente llamamos "intolerancia a la leche", que no es más que una intolerancia a la azúcar de la leche, la lactosa, por lo que perfectamente podríamos tomar leche sin lactosa. Para gente que sufre de estreñimiento, las leches vegetales, por su alto contenido en fibra, pueden ser de ayuda a la hora de ir al baño. La bebida de soja cuenta con isoflavonas, beneficiosas para las mujeres durante la menopausia y que ayudan a prevenir enfermedades cardiovasculares.
A continuación te muestro cada tipo de bebida vegetal y hacia qué tipo de público están más recomendadas.
Bebida de soja
Es la más semejante a la leche de vaca en cuanto a aporte de grasas de hidratos de carbono, además de ser una de las que cuenta con mayor nivel de proteínas. Su característica, como ya he comentado, es la presencia de isoflavonas recomendadas para la menopausia y para prevenir enfermedades cardiovasculares.
Aporta la mitad de proteínas que la leche de vaca, sin embargo, su aporte calórico se acerca al de la leche semidesnatada. Contiene poca grasa pero su aportación en micronutrientes es también baja.
Bebida de arroz
Su principal ventaja es que es muy fácil de digerir y es perfecta para personas con alergias o intolerancias alimentarias, al no incluir gluten o lactosa. Sin embargo, suele encontrarse con altos niveles de azúcares añadidos.
Bebida de quinoa
Al igual que la de arroz, es fácil de digerir porque tampoco contiene lactosa ni gluten. Además, tiene gran porcentaje de fibra, ácidos grasos esenciales como el omega 3 y 6 y más proteínas que otras bebidas vegetales.
Bebida de sésamo
Es apta para celiacos, intolerantes a la lactosa y personas con colesterol. Es rica en ácidos grasos insaturados y minerales como el hierro o el zinc. Sin embargo se aconseja evitarla si tenemos problemas digestivos como diarrea o divertículos, así como en el embarazo, porque tiene lignano, un ingrediente actualmente sometido a estudio.
Bebida de trigo sarraceno
Es rica en carbohidratos, vitaminas del grupo B, tritófano y magnesio. También es fuente de antioxidantes, beneficiosos para pacientes con problemas como hipertensión o altos niveles de colesterol.
Bebida de frutos secos
En este grupo se engloban bebidas de almendras, avellanas y nueces, que aportan ácidos grasos insaturados, vitaminas, minerales y fibra. En cambio, estos productos tienen menor cantidad de calcio, hierro, sodio y proteínas y pueden contar con muchos azúcares añadidos. Tampoco hay que olvidar que los frutos secos son uno de los alimentos que más alergias producen.
Bebida de coco
Es la bebida vegetal con más calorías, grasas saturadas e hidratos de carbono. Como punto positivo, en su composición se encuentran varias vitaminas del grupo B, fibra y minerales como el calcio, fósforo y magnesio. En cualquier caso, no se recomienda su consumo diario.
Bebida de cáñamo
Su principal ventaja es que cuenta con ácidos grasos omega 3 y omega 6, que actúan como antiinflamatorios naturales, por lo que resulta beneficiosa en enfermedades como artritis o dermatitis. Sin embargo, su valor nutricional es escaso.
Después de haber leído esta información, que espero que te haya servido de ayuda para conocer el mundillo de las bebidas vegetales, ¿no te apetece probar todas y cada una de ellas?
Fuentes: 1, 2, 3.
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